La primera reacción ante la sorpresa y la inminencia de la situación, cuya duración esperada fue mutando con el paso de los acontecimientos, en verdad fue de mucha cautela. En relación a las actividades programadas con anterioridad a la pandemia, apuntamos sobre todo a que cualquier actividad que pudiéramos ofrecer contara con la legitimidad y la rigurosidad necesaria para ser validada en las carreras de los/as posgraduados/as, tal como fueron acreditadas oportunamente. Así, junto a la invalorable colaboración del personal administrativo, de la conducción de las Carreras y de sus docentes, se procedió a establecer una forma de funcionamiento que permitiera sostener los trámites y tareas desde nuestras casas y concentrando quincenalmente el trabajo con asistencia autorizada y cumpliendo protocolos en el espacio de la FAU para poner a punto expedientes, certificados, informes estadísticos, tramitación de inscripciones a las carreras, etc. Para ello, fue fundamental el protocolo de funcionamiento virtual de nuestro Consejo de Investigación y Posgrado de la Facultad para poder dar tratamiento y dictamen a los temas emergentes ante el HCD, en vías de ir habilitando, regularizando y oficializando cada paso dado en este sentido.
Siendo conscientes de nuestras posibilidades y los márgenes de maniobra con que contábamos en medio de esta situación excepcional, y mediante consulta a los Coordinadores Académicos de dos Diplomaturas (en Producción Social del Territorio y de Diseño Estructural) que tenían previsto su inicio en abril, se decidió junto a ellos que las mismas queden con sus inicios prorrogados hasta tanto el horizonte permita mejores márgenes de previsibilidad y presencialidad.
Nos propusimos enfáticamente sostener y arbitrar los medios disponibles para mantener la actividad de Carreras de Posgrado cuyas cohortes estaban activas. Así, en el marco de la Carrera de Especialización en Arquitectura Sustentable, se concluyeron las consultas para las presentaciones de los trabajos integradores finales y se procedió a la designación de los jurados evaluadores. A la vez, con una mirada ciertamente optimista se presentaron los informes y la solicitud –ante Posgrado de la UNT- de autorización de apertura de una nueva cohorte para marzo de 2021, atentas al gran número de consultas e interesados/as en esta temática.
Respecto del Doctorado en Arquitectura, es de destacar la labor sostenida de sus actividades desde que comenzó el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio. En este marco, además del dictado de los cursos troncales, se ofrecieron cursos específicos logrando una gran convocatoria que excedió incluso a los/as doctorandos/as, pudiendo ser aprovechados por muchos/as docentes de la UNT e incluso por parte de gente residiendo fuera de la provincia. Así, con excelente participación se dictaron los cursos “Investigación y Proyecto. Epistemología y metodología de la investigación en Arquitectura”, a cargo del Profesor Roberto Fernández, desde la ciudad de Madrid; “Arquitectura y Filosofía” a cargo de la Profesora Susana Maidana; y “Diseño estructural en Arquitectura” a cargo del Profesor Horacio Saleme. En los próximos días, entre el 26 y 28 de agosto, se dictará además el curso “Escritura de textos científicos académicos de Investigación” a cargo del Dr. Julio Sal Paz, y los días 14, 15 y 16 de setiembre dictaremos el curso "Tecnología y el carácter de la vida actual" a cargo del Prof. Guillermo Ranea. Auguramos con ellos desde ya unas jornadas fructíferas y de grandes aprendizajes. Es de destacar también, desde el ámbito del Doctorado en Arquitectura, la organización y puesta en marcha de la Clínica de Tesis de la Red DOCASUR, de la que nuestro Doctorado es parte y fundador. Allí se pudo intercambiar y analizar en profundidad proyectos y avances de Tesis doctorales en Arquitectura de Sudamérica, siendo nuestra Facultad la responsable de la organización y logística. Ello también nos ha dado una perspectiva más amplia que aspira a enriquecer la producción científica de nuestro Doctorado.
En paralelo, realizamos la formalización para acreditar dos nuevas carreras ante la CONEAU que cursan distintos niveles de avance. Por un lado, la Especialización en Diseño de la Espacialidad Escénica que cuenta con aprobación del HCS de la UNT y, por otro, la Especialización en Gestión Integral de Proyecto Arquitectónico, que ya tiene dictamen favorable en nuestro Honorable Consejo Directivo y que se encuentra en vías de ser aprobada por el HCS.
Finalmente, y como actividad que intentó dejarnos interpelar y a la vez ofrecer un espacio para reflexionar sobre la coyuntura, seguras/o de que la Pandemia y sus efectos impactará de manera irrevocable en nuestras disciplinas y prácticas, lanzamos -en articulación con la Cátedra de Teoría de la Arquitectura- a principios del ASPO decretado a nivel nacional, una convocatoria para la presentación de ensayos, crónicas y relatos sobre “Habitar la Arquitectura en tiempos de Pandemia”, cuyos trabajos se sometieron a evaluación por pares a doble ciego para la confección de una publicación digital que se encuentra en proceso de edición. Del total de 33 trabajos presentados, provenientes de distintos lugares de la Provincia (San Miguel de Tucumán, Yerba Buena, San Pablo, San Pedro de Colalao), pero también de ciudades pertenecientes a Salta, Catamarca, Jujuy, Buenos Aires, La Plata, Mar del Plata y Rosario, así como de Brasil, Bolivia, Perú, México, Ecuador, y tras el Atlántico, de España y Alemania, han quedado seleccionados 28 trabajos que integrarán la publicación.
Las propuestas provinieron de docentes, estudiantes, investigadores/as y egresados/as de la FAU, pero también de personas formadas en otras disciplinas como la Geografía, la Medicina, la Enseñanza Media, dando sentido a uno de los objetivos perseguidos, esto es, incentivar a pensar el habitar desde una Ecología de Saberes, es decir, desde una perspectiva que entiende que el conocimiento se construye con el aporte de todos los saberes, sean estos disciplinares o no, y aun cuando sea sobre la “Arquitectura”, la ciudad y los territorios, sobre lo que nos propusimos capitalizarlo.
Con esto buscamos propiciar un espacio –la Universidad pública, la FAU en la UNT- que no cierre, sino que alimente el debate y la diversidad de puntos de vistas sobre un mismo tema. A la vez, pero sobre todo en estas circunstancias, sobre una misma experiencia –el confinamiento- vivido y sentido de múltiples maneras. Inabarcables, inacabables, inaprehensibles, pero a la vez nutritivas y muy productivas para repensarnos y revisarnos. Así, apuntábamos en la convocatoria:
Segur@s de que desde la disciplina y luego desde la institución podemos contribuir a pensar sobre esta vivencia global que nos atraviesa, buscamos conocer formas de percibir y problematizar el habitar la Arquitectura de manera que, además de conformar un registro amplio y enriquecedor de esta experiencia, nos permita sentipensar y explorar colectiva y críticamente nuestro presente de habitar a la luz del “Aislamiento social preventivo obligatorio” o “Cuarentena Obligatoria”, situación inesperada y excepcional.